Aled Smith: “Los inversores deben recordar que es la bolsa más grande del mundo”.
Aunque la venta generalizada de acciones a nivel mundial puede estar muy avanzada, tal vez no haya tocado fondo todavía. Es poco probable que se produzcan repuntes significativos y sostenidos de los mercados de renta variable mientras no se considere que las acciones están lo bastante baratas como para haber descontado un debilitamiento significativo de los beneficios empresariales para el conjunto del año 2009.
“Puede que estemos cerca de este punto de inflexión, pues parece que los mercados descuentan en torno a un 30% de descenso de los beneficios en el próximo año; no obstante, antes de que se inicie el nuevo ciclo de mercado alcista, podría producirse un repunte de alivio del mercado bajista, o incluso varios” comentan los expertos de la gestora de fondos BlackRock.
Gran dogma de fe
En este entorno, invertir en EEUU puede parecer un gran dogma de fe. Es lógico que los inversores, enfrentados a una desagradable mezcla de problemas en los mercados financieros, una caída importante del crecimiento económico y el desplome en el mercado inmobiliario, duden a la hora de comprar renta variable americana. “Pero antes de volverle la espalda a EEUU, los inversores deberían recordar que ese mercado de valores es el más grande del mundo” dice Aled Smith, gestor del fondo M&G American Fund. “Con unas 5000 empresas cotizadas, es también el mercado más diversificado, lo cual ofrece a los inversores la posibilidad de invertir en una amplia gama de empresas líderes incomparables” comenta este experto. Sin embargo, el desplome de las acciones y de la vivienda ha erosionado la confianza de los inversores. “El sector financiero y los hogares se verán obligados a pasar por un desapalancamiento prologando. Los precios de las viviendas todavía tendrán que tocar fondo y la tasa de desempleo probablemente aumentará hasta el 8% a finales del 2009” predicen los profesionales del banco británico Standard Chartered.
Por su parte, los empresarios del otro lado del Atlántico son muy conscientes de que en el competitivo mundo de hoy no se pueden permitir estar parados si pretenden seguir en el camino de la creación de valor. Para las compañías dispuestas a adaptar su estrategia para aprovechar la situación –o cerrar una división de negocios que tenga malos resultados– las recompensas pueden ser enormes.
Los fondos de acciones estadounidenses también se han visto afectados por las caídas del mercado de acciones. En lo que va de año, tanto los que invierten en grandes y medianas compañías como los especializados en pequeñas empresas ofrecen una rentabilidad media negativa del 30%.
Pero en este mar de pérdidas, un producto navega a contracorriente: el fondo World Express Funds I US Dynamic Equities gana un 14,5%. Se trata de un fondo de Standard Chartered Investment lanzado en mayo de 2007 en España.
Fuente: http://www.negocios.com/
Aunque la venta generalizada de acciones a nivel mundial puede estar muy avanzada, tal vez no haya tocado fondo todavía. Es poco probable que se produzcan repuntes significativos y sostenidos de los mercados de renta variable mientras no se considere que las acciones están lo bastante baratas como para haber descontado un debilitamiento significativo de los beneficios empresariales para el conjunto del año 2009.
“Puede que estemos cerca de este punto de inflexión, pues parece que los mercados descuentan en torno a un 30% de descenso de los beneficios en el próximo año; no obstante, antes de que se inicie el nuevo ciclo de mercado alcista, podría producirse un repunte de alivio del mercado bajista, o incluso varios” comentan los expertos de la gestora de fondos BlackRock.
Gran dogma de fe
En este entorno, invertir en EEUU puede parecer un gran dogma de fe. Es lógico que los inversores, enfrentados a una desagradable mezcla de problemas en los mercados financieros, una caída importante del crecimiento económico y el desplome en el mercado inmobiliario, duden a la hora de comprar renta variable americana. “Pero antes de volverle la espalda a EEUU, los inversores deberían recordar que ese mercado de valores es el más grande del mundo” dice Aled Smith, gestor del fondo M&G American Fund. “Con unas 5000 empresas cotizadas, es también el mercado más diversificado, lo cual ofrece a los inversores la posibilidad de invertir en una amplia gama de empresas líderes incomparables” comenta este experto. Sin embargo, el desplome de las acciones y de la vivienda ha erosionado la confianza de los inversores. “El sector financiero y los hogares se verán obligados a pasar por un desapalancamiento prologando. Los precios de las viviendas todavía tendrán que tocar fondo y la tasa de desempleo probablemente aumentará hasta el 8% a finales del 2009” predicen los profesionales del banco británico Standard Chartered.
Por su parte, los empresarios del otro lado del Atlántico son muy conscientes de que en el competitivo mundo de hoy no se pueden permitir estar parados si pretenden seguir en el camino de la creación de valor. Para las compañías dispuestas a adaptar su estrategia para aprovechar la situación –o cerrar una división de negocios que tenga malos resultados– las recompensas pueden ser enormes.
Los fondos de acciones estadounidenses también se han visto afectados por las caídas del mercado de acciones. En lo que va de año, tanto los que invierten en grandes y medianas compañías como los especializados en pequeñas empresas ofrecen una rentabilidad media negativa del 30%.
Pero en este mar de pérdidas, un producto navega a contracorriente: el fondo World Express Funds I US Dynamic Equities gana un 14,5%. Se trata de un fondo de Standard Chartered Investment lanzado en mayo de 2007 en España.
Fuente: http://www.negocios.com/
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