Incrementos de sueldos otorgados en pequeñas dosis y no a todos los empleados por igual. Estos son algunos de los puntos de coincidencia en los presupuestos que elaboraron las empresas locales. En este contexto, surge un "número mágico" donde converge la suba salarial prevista para este año
Puntos Importantes
- A pesar del escenario complicado, hay un tema al que las empresas no podrán escaparle en estos primeros meses del 2009: la mejora de los sueldos de sus empleados.
- La mejora salarial proyectada por las compañías argentinas rondará entre el 15 y el 18%, según un relevamiento de la consultora Watson Wyatt.
- Según Angeli, "habrá dos momentos de ajustes en el año. Las primeras subas se darán entre enero y abril."
- Si bien Kritz considera "muy difícil arriesgar un porcentaje", estima que los acuerdos finalmente van a estar en torno al 15 por ciento.
Las compañías tratarán de dar ajustes más competitivos a quienes quieran retener o a quienes les resulte costoso perder.
Pero a pesar de este panorama, hay un tema al que las empresas no podrán escaparle en estos primeros meses del 2009: la mejora de los sueldos de sus empleados ya que –aunque avanzando a menor ritmo- la inflación dirá presente este año.
Si bien todas las fuentes consultadas por iProfesional.com coinciden en que el “número mágico” dependerá de la evolución de los precios y de los acuerdos que se cierren en las paritarias, un relevamiento de la consultora Watson Wyatt revela que para el personal fuera de convenio (es decir, analistas, supervisores, jefes, gerentes y directores) la mejora salarial proyectada por las compañías argentinas rondará entre el 15 y el 18 por ciento.
“Estamos hablando de ajustes entre un 15 y un 18% para todo el 2009. Si bien existen excepciones, habrá dos momentos de ajustes en el año. Las primeras subas se darán entre enero y abril y tratando de consumir entre el 50 y el 60% del presupuesto. El resto las empresas se lo van a guardar y que lo vuelvan a utilizar va a depender de tres variables: los sindicatos, cómo va el negocio y el mercado laboral”, explica a iProfesional.com Marcela Angeli, directora del Área de Capital Humano de Watson Wyatt.
En tanto, desde Ecoviews, también estiman que "muchas empresas van a otorgar los aumentos en dos etapas a lo largo del año."
Paritarias versión 2009
En opinión de Ernesto Kritz, director de SEL Consultores, "el conjunto de los sectores va a estar en una posición menos favorable para otorgar aumentos salariales que la que tuvo hasta ahora. Y los sindicatos también van a estar en un lugar negociador no tan favorable. Estamos en una situación de negociación salarial en un nuevo ciclo del mercado de trabajo donde el deterioro de la situación laboral va a ser un factor importante a la hora de la discusión."
Para Kritz, los porcentajes de subas salariales serán menores –e incluso en algunos casos estarán "sensiblemente" debajo- de lo que fueron en el 2008.
"El primer trimestre va a ser muy malo tanto en materia económica como de demanda de trabajo. Toda la situación ha cambiado. Estamos en un ciclo bajista del mercado de empleo y esto va a condicionar sensiblemente la negociación salarial", asegura. Y, dado este escenario, el director de SEL Consultores no se atreve a arriesgar cuáles serán los sectores de la economía mejor posicionados para enfrentar posibles subas.
Para ejemplificar, Kritz toma el caso de las automotrices. "Algunos sectores que tenían una situación muy buena como fue el caso de la industria automotriz están sufriendo una caída importante en su nivel de actividad y no hay perspectivas de que vuelva a recuperarse sino muy parcialmente, al menos hasta marzo que es el mes en el que arrancarán las negociaciones paritarias", dice.
No obstante, reconoce que "si hay un factor favorable, por llamarlo de alguna manera, es que a diferencia de la negociación salarial de marzo de 2008, éste se hará con inflación en baja y no en alta. Esto va a facilitar un poco las cosas, pero los empresarios no aceptarán aumentos muy importantes y creo que tampoco los sindicatos los van a pedir porque hay conciencia de que lo más crítico en este momento es la preservación del empleo. Mas bien la negociación salarial será en torno a la inflación esperada para este año y no la del 2008."
Y aunque considera "muy difícil arriesgar un porcentaje", estima que los acuerdos finalmente van a estar en torno al 15%. "No imagino acuerdos por arriba de ese porcentaje. Va a ser sensiblemente menor al año pasado", remarca.
En Ecoviews, en tanto, proyectan que la pauta salarial rondará entre 15 y 16%. No obstante, Eric Ritondale, economista de la consultora, advierte que "está la posibilidad de subirla un poco porque como se trata de un año electoral las discusiones pueden llegar a ser más fuertes."
Si bien desde la consultora que dirige Miguel Kiguel resaltan que uno de los principales factores al momento de negociar salarios será la inflación, reconocen que al mismo tiempo, el menor nivel de actividad y el hecho de que el desempleo va a comenzar a ser una amenaza para la fuerza laboral, puede llegar a dar menor margen de maniobra a los sindicatos.
"El porcentaje de aumentos dependerá mucho de las perspectivas de cada sector, pero imagino que la construcción va a estar un poquito mejor que en el 2008, al menos en términos relativos", prevé Ritondale.
En tanto, Kritz enfatiza: "La ronda de negociaciones en serio empezará en marzo. Y como el primer trimestre en materia económica no va a ser nada bueno, creo que esto también va a condicionar la negociación."
Empleados, con esperanzas a la baja
A pesar de estas proyecciones de suba, del otro lado los empleados ven un panorama cuanto menos gris respeto a las mejoras de sus salarios. De hecho, un relevamiento realizado en diciembre por la consultora CM Sociología al que accedió iProfesional.com reveló que casi ocho de cada diez ejecutivos consultados (76%) no imagina que su salario se incrementará este año.
De los que son optimistas y esperan una mejora en su remuneración (sólo el 24%), más de la mitad de los casos (55%) piensa que esa suma será mínima: de tan sólo 10 por ciento. (Ver nota: Ocho de cada diez ejecutivos cree que no recibirá aumentos y arma su propio plan anticrisis )
Pero aquellos ejecutivos que no pierden las esperanzas miran con atención las negociaciones paritarias entre los gremios y las empresas ya que saben que éstas direccionan los posibles futuros incrementos del personal que no está incluido en los convenios colectivos de trabajo, sobre todo los de los empleados que están en las posiciones más bajas de la pirámide, como son los analistas y supervisores, para evitar el famoso solapamiento.
Y si bien la temporada alta de las discusiones será en marzo, días atrás se cerró uno de los primeros acuerdos para la pauta salarial 2009: el sindicato de los mecánicos (SMATA) y las concesionarias automotrices (ACARA) acordaron un incremento de 15% a pagar en dos cuotas, de 7 y 8% respectivamente.
La directora del Área de Capital Humano de Watson Wyatt enfatiza que “el rango de entre 15 y 18% del que hablan las empresas depende mucho de la inflación” y reconoce que “las mejoras incluso puede llegar a ser menores.”
Angeli destaca que “en septiembre todo indicaba que los incrementos iban a rondar entre un 22 y 25%, pero dado el cambio de escenario y en la medida en que la inflación no se dispare, las empresas van a tratar de usar el presupuesto salarial lo más eficientemente posible.”
A quiénes tocará la varita del aumento
Así, se estima que las compañías tratarán de dar ajustes más competitivos a quienes quieran retener o a quienes les resulte costoso perder, y otorgarán ajustes más conservadores para aquellos que no son críticos o a quienes no les sea tan caro desvincular.
Como parte del estudio "Gestión y control de los costos laborales" realizado por Watson Wyatt entre 50 empresas de primera línea, se preguntó a las compañías si en la actual coyuntura reforzarán las políticas de retención de su personal clave. Al respecto, el 44% de las consultadas contestó afirmativamente.
En este sentido, Angeli aclara que si bien para retener al personal clave, la mayoría de las empresas dijo que la acción a tomar iba a ser ajustes de sueldos, éstos van a ser mucho más selectivos.
Para la ejecutiva de Watson Wyatt, las compañías venían muy bien y prácticamente para cuando estalló la crisis la mayoría ya había cumplido la meta presupuestada o estaban muy cerca.
Pero, en su opinión, “la realidad va a ser mucho más cruda durante este primer trimestre, donde los resultados no van a ser ni siquiera parecidos a los que tenían presupuestados. Y encima en enero y febrero son muy pocas las industrias para las que es temporada alta.”
Sólo una de cada diez empresas, a salvo
Un 90% de las empresas consultadas admitió haber sufrido el impacto de la crisis y un 71% aseguró haber tomado acciones en sus políticas de personal. De hecho, el 20% admitió haber producido alguna cesantía y el 15% reconoció que despedirá personal durante el primer trimestre de este nuevo año.
No obstante, Angeli enfatiza que como las empresas tienen en su memoria todavía muy fresco lo que sucedió en la Argentina en 2001 y 2002 cuando hubo muchos despidos y las dificultades que luego encontraron cuando -con la reactivación económica- necesitaron salir reclutar mano de obra calificada, evitarán los recortes de personal y lo perdido lo que fue invertido en capacitación.
“Las automotrices vivieron a fines de 2002, con la reactivación, la falta de personal capacitado, por lo que hoy van a tratar de pelear por perder la menor cantidad posible de recursos humanos”, asegura.
Los más perjudicados
Según el relevamiento de la consultora internacional, las aristas del área de Recursos Humanos que se vieron más afectados son:
Reclutamiento y selección: 46%
Compensaciones: 37%
Clima laboral: 31%
Beneficios: 30%
Desarrollo de carrera: 19%
Retención de personal: 18%
Planes de sucesión: 16%
Evaluación del desempeño: 15%
Dado el actual contexto y las perspectivas poco positivas para el primer trimestre del año, las empresas optarán por no contratar nuevos empleados, incrementar la comunicación del paquete de compensación, y también por eliminar o reducir otros programas ofrecidos a los empleados.
Presupuestos en baja
Con la crisis internacional como telón de fondo y su impacto –para nada menor- en la economía local, tres de cada diez (31%) de las compañías locales sondeadas dijo que se vio obligada a reducir sus presupuestos para el área de Recursos Humanos. Consultadas acerca del porcentaje del recorte, contestaron que la disminución fue en tormo al 15 por ciento.
Fuente: http://economia.infobaeprofesional.com/
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